España aplasta a Croacia y sueña con todo en la Eurocopa
España sueña, y con razón, con su cuarta Eurocopa. La Roja arrolló a Croacia (3-0) en un debut de ensueño en el torneo continental para demostrar que es el gran ‘coco’ del ‘grupo de la muerte’. Ni la magia de Modric pudo salvar al combinado balcánico, que no tuvo premio ni desde el punto de penalti.
Con todas las miradas puestas sobre Cucurella, la gran sorpresa en el once de Luis de la Fuente, arrancó el debut de la selección española en la Eurocopa de Alemania. Poco duró el escrutinio en el lateral izquierdo, pues la Roja se afanó en la presión constante en la salida de balón de Croacia para robar el esférico y generar peligro a la meta de Livakovic.
Avisó con acercamientos por las bandas, con Lamine Yamal y Nico Williams buscando la espalda de la zaga balcánica, aunque le faltó acierto para amenazar de verdad la portería rival. Lo demostraron Pedri y Fabián tras una conducción de Lamine. No se entendieron el canario y el ex del Betis, y la pared que habría dejado solo a Pedri se fue por línea de fondo. Tampoco acertó Morata con un disparo desde fuera del área.
El paso de los minutos bajó la frecuencia de España, y eso animó a una Croacia que se fue acercando cada vez más a la meta de Unai Simón, que incluso tuvo que dejar su área para despejar de cabeza un balón largo para Budimir. Pero el combinado balcánico tampoco terminó de hacer peligro real.
Y cuando peor parecía que estaba España, Cucurella robó un balón y lo despejó para Fabián, que vio a Morata hacer el desmarque con la portería rival entre ceja y ceja. Recibió el cuero en capitán, pisó área y aguantó, con nervios de acero, a Livakovic, que esperó demasiado y terminó dejando espacio para que el ‘7’ marcase a placer.
No había terminado de celebrar la afición española presente en el Estadio Olímpico de Berlín cuando la Roja firmó el segundo. Esta vez, el asistente se convirtió en goleador. Si Fabián no se había entendido con Pedri al inicio del partido, esta vez sí lo hizo. El canario le dejó el cuero en la frontal, y el ‘8’ de España recortó ante Luka Modric para pisar área y clavar en la red un disparo cruzado con la zurda.
A ambos tantos respondió Croacia con dos ocasiones claras: primero, un remate al lateral de la red de Majer, y después, un disparo de Kovacic, que llegó a la frontal del área sin oposición y buscó el remate, que terminó en las manos de Unai Simón. Y tuvo otra justo antes del descanso, con un centro-chut de Gvardiol que no terminó de coger portería, y que Budimir tampoco llegó a rematar.
Cuando parecía que el partido ya se iría al receso con 2-0 en el marcador, apareció Dani Carvajal. El lateral derecho, que debutaba en un Eurocopa pese a ser seis veces campeón de Champions League con el Real Madrid, entró con todo en el área pequeña para rematar un centro de Lamine Yamal tras un saque de esquina que la Roja botó en corto. 3-0 para la selección y partido prácticamente sentenciado.
El plan de España no varió con el paso por los vestuarios. La selección regresó al campo con el mismo ímpetu en la presión, buscando robar… y con muchas ganas del cuarto. Pudo hacerlo Lamine Yamal, pero una gran mano de Livakovic le privó de marcar en el día que hacía historia en la Eurocopa —al convertirse en el jugador más joven en debutar y ser titular en el torneo continental—. Morata estuvo muy cerca del doblete, pero remató como pudo un centro de Yamal que no cogió portería.
Poco más pasó en el segundo tiempo, más allá de que la actuación de Cucurella, que salvó un gol cantado de Stanisic y evitó una ocasión clara de Majer, dio la razón a Luis de la Fuente, y un penalti que España concedió tras un error de Unai Simón. El guardameta, sin embargo, lo arregló adivinando el lanzamiento de Petkovic para asegurar la portería a cero en el debut de la Roja.
Y no hubo tiempo para más en el partido perfecto de la selección española, en el que solo los problemas físicos de Morata y Rodri empañaron el debut y la victoria. España ya puede gritarlo: la cuarta Eurocopa no está tan lejos, y la Roja ya sueña con ella.