Gravísimos mensajes a la novia del jugador del Córdoba que insultó a los catalanes: "Esto se os está yendo de las manos"
El ascenso del Córdoba tras vencer al Barça B terminó con muchísima polémica por los insultos de un jugador del conjunto andaluz contra la comunidad catalana. Pese a que más tarde se disculpó, sus palabras aún están teniendo consecuencias para su pareja, Paola Montero, que este martes denunció haber recibido gravísimos mensajes en sus redes.
«Dile a tu esposo que te cuida más que nunca hija de puta, estén atentos», «perra, vamos a matar a tu novio el Calderón ese, puta de su madre y puta Córdoba», «guarra de mierda espero que te maten a ti y al asqueroso de tu novio, vuestros muertos puta zorra» o «puta de mierda me cago en tus muertos y un cáncer le coma a tus abuelos y a toda tu familia», son algunos de los que la joven compartió.
Además, junto a las capturas de pantalla de esos mensajes, Montero escribió: «Y podría seguir con miles de mensajes así… vuelvo a pedir disculpas por la parte que me toca, porque yo tampoco estoy orgullosa de las palabras de mi novio, pero esto se os está yendo de las manos».
«Me cago en los muertos de todos los catalanes», fueron las palabras del futbolista de 24 años en un directo en su Instagram a las que se refiere la joven. «Pido perdón a toda la gente de Barcelona y a todos los catalanes por mis actos en el directo de esta tarde», publicó poco después.
El jugador, además, publicó un nuevo comunicado este martes disculpándose de nuevo: «Durante la celebración por el ascenso del Córdoba, en medio de la euforia y la emoción del momento, hice unos comentarios que no tenía intención de hacer. Quiero pedir disculpas sinceras a todos aquellos que se hayan podido sentir ofendidos por mis palabras».
«Reconozco que mis comentarios fueron inapropiados y lamento profundamente cualquier malentendido. Quiero dejar claro que respeto a todo el mundo y que mis palabras no reflejan mis verdaderos valores. Continuaré esforzándome por representar al club con el respeto y la dignidad que todos merecemos», concluyó Calderón.