La confesión más personal de Carolina Marín: "Nunca he tenido un referente, me he dedicado a trabajar"
Carolina Marín ha conseguido que se hable del bádminton en España, un deporte que prácticamente no se practica en nuestro país, pero que es el más importante de China. Por ello y por su gran trayectoria, la campeona del mundo de bádminton ha ganado el Premio Princesa de Asturias del Deporte de 2024 y ahora mira a los Juegos Olímpicos de París para intentar conseguir una medalla.
No obstante, haber llegado hasta aquí no ha sido fácil, de hecho, tal y como ha contado en una entrevista a Glamour, nunca ha tenido un referente: «Ni he podido ni he tenido nunca un referente, de ningún género. A lo que me he dedicado es a trabajar. Es muy sacrificado, hay que renunciar a muchísimas cosas que mucha gente no está dispuesta a hacer».
«No obstante, me compensa porque me siento muy afortunada y encima puedo decir, desde hace ya varios años, que puedo vivir de un deporte que era totalmente desconocido en nuestro país. Sé que muchos deportistas no se encuentran en esa situación», continúa diciendo Marín sobre lo que ha supuesto el bádminton para ella.
Asimismo, la onubense confiesa lo que supone para ella haber recibido el Premio Princesa de Asturias del Deporte de 2024: «Lo más bonito es que me lo han otorgado cuando todavía estoy en activo, no cuando ya he colgado la raqueta. Te están reconociendo todo el esfuerzo. Siempre lo he dicho, a mí, en mi vida, nadie me ha regalado nada, me lo he tenido que currar y trabajar todo muchísimo».
«Esto es precisamente lo que no quiero que se quede en la sombra. Las medallas y los trofeos son muy bonitos, pero muy poca gente sabe todo lo que hay detrás: ese camino que te conduce a conseguir una medalla en forma de recompensa y cómo a veces a pesar de todo no se logra», explica sobre lo que ha tenido que trabajar para llegar a donde está.
Sobre cómo llega a los Juegos de París
Marín viajó a China cuando todavía era una niña, donde allí el bádminton es el deporte principal, a diferencia de en España. Asimismo, reconoce que es un gran honor que la hayan reconocido en el país asiático: «Me siento orgullosa de haber logrado ser allí muy reconocida. Lo que más ilusión me hace de todo esto, aparte de obviamente conseguir mis medallas, es haber puesto en boca de todos los españoles el bádminton. La primera vez que fui a China, con 12 años, me maravilló ver a abuelos de 80 años jugando a bádminton en la calle».
La campeona olímpica en Río de Janeiro en 2016 también ha hablado de cómo va a afrontar los Juegos de París 2024: «Voy a sacar mi mejor momento, estoy segura de que lo voy a hacer. Quiero disfrutar de cada segundo que esté en una pista. Lo único que pido y quiero es que mi cuerpo me respete estos dos meses y medio que quedan, que me deje entrenar, que me deje exprimirme y dar el 100 % en cada uno de los entrenamientos, porque sé que mi mejor estado de forma y de mi carrera deportiva la voy a tener en París».