La leyenda viva de los deportes de contacto Ronda Rousey y su particular concepto de conciliación familiar

En un momento en el que la conciliación familiar y el embarazo en el deporte femenino está dando tanto que hablar y creando mucho debate, la luchadora Ronda Rousey plantea un nuevo punto de vista y ofrece un nuevo punto de vista a la conversación. La que fuera medallista olímpica en judo, campeona de la UFC (primera mujer en ganar un título femenino en la compañía más importante de Artes Marciales Mixtas –MMA-) y campeonas de la WWE de lucha libre profesional, llevaba desaparecida desde 2019 y este fin de semana regresó por sorpresa a la acción… sólo cuatro meses después de haber tenido su primera hija.

Ronda Rousey fue una de las apariciones sorpresa del primer evento pay-per-view del año en la WWE, el Royal Rumble. La luchadora entró en el ring para llevarse la victoria y asegurarse su presencia en el Wrestlemania 38, el evento más importante del año en la compañía de lucha libre profesional. La propia luchadora hizo referencia a su éxito inmediato publicando una serie de fotografías y un texto de lo más elocuente en su cuenta personal de Instagram.

«Acabo de tener un bebé hace 4 meses… Desde el día que supe que estaba embarazada y calculé mi fecha de parto, supe que quería volver a WWE en el Royal Rumble 2022. Dos semanas, incluso dos meses después del parto ese objetivo parecía más loco que nunca. Pero es que lo echaba tanto de menos… Y tenía tantas ganas de darle a Po [su hija] el mismo ejemplo que nos dio mi madre a mí y a mis hermanas: ella nunca rompió el paso siguiendo sus sueños mientras nos tenía. Ahora me toca a mí», escribió ‘Rowdy’ en Instagram.

Brad Slater, manager de la luchadora, confirmó las palabras de Ronda Rousey. «Es absolutamente cierto. En el mismo momento en el que supiste la fecha [del parto], el Royal Rumble fue el plan. Me lo dijiste 50 veces. Supe que lo conseguirías porque era algo tan loco como todos los otros planes que hiciste y lograste. Sólo hay una RRR [Rowdy Ronda Rousey]. ¡Enhorabuena, campeona!».

Normalmente una luchadora de wrestling necesita de aproximadamente un año para regresar al ring. Sin embargo, Ronda Rousey no ha querido tomarse tanto tiempo y ha vuelto por la puerta grande. Daba igual si su físico no era el  perfecto o el ideal para una estrella de la lucha libre. De hecho, la indumentaria que utilizó en su vuelta a las andadas intentaba maquillar los rigores del postparto y la lactancia, pero daba exactamente igual. Era el primer paso de un camino bastante largo en el que ya habrá tiempo de estar a tono. Lo importante en ese momento era seguir engordando su leyenda y ampliando su legado, como ella misma decía.

La conciliación familiar no será fácil debido a la política de viajes de la WWE, pero el carácter y la personalidad de la Ronda Rousey persona, que no personaje, sabrá lidiar con ello. A buen seguro que en su nuevo contrato con la compañía, ‘Rowdy’ ha dejado todo atado como la estrella que es. 

Pudiendo parar, ha decidido seguir y servir de ejemplo. Pudiendo dar un paso a un lado o mantenerse al margen, ha preferido mostrar que la maternidad no inutiliza a la mujer, sino que la puede hacer más fuerte. Sólo hay que tener las ideas claras y las prioridades bien marcadas. «Regresaré a mi autobús y amaré a mi pequeña bebé. Eso es realmente lo único que me importa en este momento. Mis prioridades cambiaron», comentó Rousey tras su reaparición. ¡Ole tú!