Hola, ¿qué tal?
Soy el Contralor de la ciudad de Nueva York. Nací y crecí en un apartamento de renta controlada en Washington Heights, alto Manhattan. Estudié en escuelas públicas y en John Jay College (CUNY). Fui electo a la Asamblea en 1992. Me arrestaron por protestar la muerte de Amadou Diallo y he pasado leyes contra la violencia doméstica y la igualdad en el matrimonio. También fui presidente del Condado de Manhattan.
Amo la ciudad de Nueva York y estoy listo a ser su líder con una agenda ambiciosa y renovadora. Tengo la experiencia de muchos años de trabajo en el sector público, he enfrentado crisis y poseo el liderazgo para sacarla de la crisis que originó la pandemia. He estado ligado a las comunidades, apoyando a los inmigrantes y protegiendo sus derechos.
Mi campaña es para pelear por nuestro futuro a nivel económico, el medio ambiente y justicia social. El Coronavirus ha revelado nuestras injusticias en el sistema de salud, los empleos y nuestros trabajadores esenciales, en especial mujeres de las minorías, quienes siguen en el frente de batalla, sumidas en la pobreza. Como alcalde trabajaré por estas familias, mejoraré los hospitales públicos y regresaré los estudiantes a las escuelas.
Desde la Avenida Roosevelt en Queens hasta la Calle Dyckman en Washington Heights, los corredores comerciales dependen de la fortaleza de los negocios latinos. Les otorgaré rebajas de impuestos a los pequeños negocios, reduciré la burocracia y agilizaré las restricciones de los permisos. Fomentaré el desplazamiento a digital, crearé trabajos bien remunerados y combatiré la explotación y robo de salarios. Estoy proponiendo que estudiar en CUNY sea gratis.
Una cosa es segura: para abrir la economía debemos tener un sistema de transporte rápido y equitativo, sin vagones repletos y demoras en el servicio. El alcalde no controla la MTA, pero mis designados en la junta lucharán por los usuarios neoyorkinos. Mejoraré calles y buses, reduciré tarifas y continuaré con mi plan ‘NYC in 6’ para nadie espere más de 6 minutos por un tren o bus.
Desde mis días como organizador de vivienda, reconozco que es la raíz de la movilidad social. Como alcalde construiré vivienda a bajo costo para los más pobres y que no sean víctimas de desplazamiento y desalojos. Los nuevos edificios deben tener 25% de apartamentos para personas de bajos recursos. Tomaré los lotes vacíos para ayudarle a 560,000 neoyorkinos que requieren vivienda. Los muy ricos pagarán más impuestos.
En este momento hay más de 5,000 personas arrestadas en Rikers, muchos no han sido convictos de crímenes y no tienen cómo pagar la fianza. El sistema de justicia criminaliza a los pobres y esto no nos hace más seguros. Debemos cerrar Rikers porque cuesta más de $400,000 al año mantener un preso ($920 por día). Como alcalde reduciré la población en la cárcel e invertiré en la comunidad.
Todos los estadounidenses y neoyorkinos merecen acceso a un sistema de salud a bajo precio. Pagar por la salud no debe ser una preocupación. Como alcalde aumentaré los hospitales y clínicas comunitarias para que todos tengamos acceso a cuidado primario y salud mental, sin importar su nivel de ingreso o estatus migratorio.
Para mi lo más importante es el clima. Mi éxito como figura política depende de lo que haga por la sobrevivencia de la ciudad y el planeta. Tengo dos hijos y su futuro depende de la reducción de emisiones, aire limpio y energía renovable que combata el racismo ambiental y enfermedades crónicas como el asma. Hay que frenar inundaciones, desbordamiento de cañerías y lluvia en estaciones de trenes.
A mi opinión personal creo que es el candidato a apoyar, sus alineaciones políticas van muy paralelas a los hispanos que vivimos en la gran manzana.
HASTA LA PROXIMA AMIGOS
