Por Iván Acosta
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El régimen de Nicolás Maduro ha acordado reanudar los vuelos de repatriación para trasladar a ciudadanos venezolanos deportados desde Estados Unidos, según informó el diplomático estadounidense Richard Grenell, de acuerdo con reportes de medios en Venezuela y EE. UU..
Razones detrás de la reanudación de los vuelos
La medida se produce después de que Maduro admitiera que los vuelos se habían visto «afectados» por la decisión de la administración de Donald Trump de revocar una licencia especial que permitía a Chevron producir y vender petróleo en Venezuela, a pesar de las sanciones impuestas al régimen.
Grenell, quien se desempeña como enviado de Trump para misiones especiales, se reunió con Maduro en Caracas el 31 de enero y logró la liberación de seis ciudadanos estadounidenses que Washington consideraba encarcelados injustamente. Además, en este encuentro, se concretó el compromiso de Venezuela de aceptar nuevamente los vuelos de repatriación.
«Me complace anunciar que Venezuela ha acordado reanudar los vuelos para recoger a sus ciudadanos que infringieron las leyes de inmigración de EE. UU. y entraron ilegalmente», anunció Grenell en su cuenta de X.
«Los vuelos se reanudarán el viernes», agregó.
Hasta el momento, la administración de Trump no ha brindado mayores detalles sobre la reanudación de los vuelos.
El contexto de las deportaciones
Antes de la revocación de la licencia de Chevron, poco más de 600 migrantes venezolanos habían sido repatriados en estos vuelos, como parte de un intento frágil de mejorar las tensas relaciones entre Washington y Caracas.
Mientras que el gobierno estadounidense ha presentado a los migrantes deportados como criminales peligrosos, en Venezuela han sido recibidos con los brazos abiertos.
El ministro del Interior, Diosdado Cabello, recibió en el aeropuerto a cientos de migrantes deportados desde la base militar estadounidense en la Bahía de Guantánamo, Cuba, así como en vuelos procedentes de Texas.
En declaraciones transmitidas por la televisión estatal, Cabello aseguró que los migrantes han sido injustamente etiquetados como delincuentes y miembros de la banda criminal Tren de Aragua.
«Fueron llevados a Guantánamo sin haber cometido ningún tipo de infracción legal», declaró Cabello, mientras recibía a un grupo de 177 venezolanos que habían sido trasladados a la base naval en Cuba antes de su retorno a Venezuela.
Las autoridades venezolanas han indicado que, tras verificar que los migrantes no tienen antecedentes penales pendientes, la mayoría ha sido autorizada para reunirse con sus familias.
