Virginia Torrecilla, la superheroína del fútbol español: 683 días sin jugar y sin perder la sonrisa

El fútbol español ha tenido un único nombre propio este fin de semana: Virginia Torrecilla. La centrocampista del Atlético de Madrid volvió a los terrenos de juego este domingo en la Supercopa contra el Barça después de 683 días y de ganar el partido contra el cáncer que sufrió. Más allá del resultado del encuentro, ella fue la absoluta ganadora.

El fútbol español se estremeció cuando el pasado 21 de mayo de 2020 la centrocampista anunciaba que se le había detectado un tumor cerebral y que había sido operada con éxito. Desde entonces, el árbitro de su carrera profesional pitaba el descanso, pero a la vez, empezaba el partido más difícil de su vida y que finalmente ganó. Y por goleada.

Si algo ha acompañado a Virginia en todo este tiempo ha sido su sonrisa, esa que ella nunca ha dudado lucir. Y no porque no haya tenido momentos malos, que los ha sufrido, sino por siempre querer mostrar una imagen positiva dentro del calvario que estuvo pasando. Un ejemplo que trasciende mucho más allá del fútbol.

En el vídeo en el que anunció que se le diagnosticó el tumor, se despidió con una sonrisa. Cuando compartía imágenes de su tratamiento, lo hacía con sonrisa. Cuando volvió al vestuario del que el cáncer le privaba de estar con sus compañeras, también lo hizo sonriendo. Sin embargo, ninguna tan grande como la que lució este domingo en su vuelta a los campos de fútbol.

Después de casi un año de quimioterapia, en marzo de 2021 compartió la mejor noticia posible: estaba limpia de cáncer. Ese mismo mes pudo volver a incorporarse a los entrenamientos con sus compañeras y poco a poco ha ido preparándose para que su gran vuelta llegase lo antes posible, pero siempre de manera segura.

Los amantes del fútbol se comenzaron a frotar las manos el pasado miércoles cuando se anunció que Virginia estaba convocada para la Supercopa femenina, aunque hubo que esperar algo más para verla. No volvió en semifinales, sino en la gran final contra el Barça, donde militó tres temporadas, y aunque fuesen solo unos minutos los que disputó, significaron más que todos los que se perdió de baja

La imagen del año, el manteo que recibió tras el partido de las jugadoras del Barça, aderezadas por las palabras que le dedicó Graham Hansen, nombrada mejor jugadora de la final: «Ella es la auténtica ‘MVP’ del partido«. Goleada de Virginia al cáncer.